La principal motivación es dar conocer la historia y anhelo que llevo a la creación de Sueño Escondido. Era el deseo de mi padre convertir este pequeño espacio en su casita de campo con piscina y así le comentaba a su gente querida de Cañabón, Barranquitas. Yo contestaba “Sí” por no hacerle sentir mal, pero a solas le comentaba: “No puedo hacer eso, no comentes eso” y él respondía simplemente con una risa de travieso.
Una tarde; como cualquier otra, de un día normal, como cualquier otro, recibí la llamada más desgarradora y dolorosa, la cual marcaría el momento en el que pondría a prueba mi nivel de fortaleza y resistencia. Mi padre comenzó a enfermar, el infierno vivía en su cuerpo, su fuerte dolor se repetía segundo a segundo y ya insoportable. Sus energías comenzaron a disminuir, su estado físico se agotaba poco a poco. Un día dejó de latir un corazón amado. Mis días y noches se convirtieron en momentos de oscuridad. Al pasar los días, se intensificaba el silencio y el dolor, pero prometí ser una mujer guerrera y el pilar de la familia, tal como me lo enseñó mi padre.
En la medida que transcurrían los momentos difíciles pensaba en la casita de campo con piscina que él anhelaba. Cuánto me enseñó, al apostar y creer en su hija. Gracias a esto hoy puedo gritarle al mundo que logré su sueño. Su casita escondida, la cual con mucho sacrificio fui diseñando. En los momentos en que entraba el sentimiento de que no podría más, me llegaban las fuerzas del gran creador, llenándome de creatividad e ilusión. ¡Wao!, Sí que eres el rey del imposible.
¡Te extraño!, hoy no estás conmigo físicamente porque fuiste a un paraíso en el que ya no sufres de ese gran dolor (cáncer).
Desde tu casita; lo que jamás imaginé, fue una ilusión se convertiría en Mi Sueño Escondido.
Te llamo, te siento y te disfruto…
Te Amo Papi,
Tu hija
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